Día Mundial de la Nutrición: Promoviendo Hábitos Saludables para un Futuro Mejor
El 28 de mayo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) conmemora el Día Mundial de la Nutrición, una fecha dedicada a destacar la importancia de mantener una alimentación consciente, equilibrada y adecuada. Este día nos recuerda que una buena nutrición es fundamental para prevenir el sobrepeso, la obesidad y otras enfermedades no transmisibles. Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2018 en Ecuador, la prevalencia combinada de sobrepeso y obesidad en adultos de 19 a 59 años fue de un alarmante 64,68%.
La OMS define la nutrición como la ingesta de alimentos necesaria para satisfacer las necesidades dietéticas del organismo. Esta definición enfatiza que la nutrición debe ser personalizada, considerando factores como la edad, el sexo, la actividad física y el estado fisiológico. Consultar a un profesional en Nutrición es crucial para diseñar un plan de alimentación adaptado a nuestras necesidades individuales.
La rutina actual y sus desafíos
En la actualidad, la rutina y la falta de tiempo han llevado a muchas personas a adoptar hábitos alimentarios poco saludables. La preferencia por alimentos procesados, bajos en fibra y altos en azúcar y sal ha aumentado, elevando el riesgo de diversas afecciones como:
- Enfermedades no transmisibles
- Estreñimiento
- Retraso en el crecimiento infantil
- Enfermedades por deficiencia nutricional
- Pérdida de masa muscular
Alimentarse de Forma Nutritiva
Para mejorar nuestra nutrición y salud general, es esencial ser conscientes de lo que comemos y adquirir hábitos saludables. Una nutrición balanceada incluye:
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Consumo equilibrado de macronutrientes: Asegurarse de ingerir carbohidratos, proteínas y grasas en proporciones adecuadas.
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Horarios de comida regulares: Mantener un horario fijo para las comidas ayuda a regular el metabolismo.
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Comer de forma consciente: Dedicar al menos 20 minutos a cada comida principal, masticando despacio.
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Evitar el exceso de azúcar: Reducir el consumo de alimentos y bebidas con alto contenido de azúcar.
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Disminuir el consumo de sal y alimentos ultraprocesados: Optar por alimentos frescos y naturales.
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Incorporar pre y probióticos: Consumir yogurt natural, kéfir, pan de masa madre, y una variedad de frutas y verduras para mejorar la microbiota intestinal y, en consecuencia, la salud general.
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Grasas de buena aalidad: Elegir fuentes de grasas saludables como el aceite de oliva extra virgen, aguacates, aceitunas, pescado azul y frutos secos.
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Proteínas Magras: Preferir carnes bajas en grasa.
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Buena Hidratación: Beber entre 1 a 2 litros de agua al día.
El Impacto de la Pandemia en la Nutrición
La pandemia de COVID-19 nos ha mostrado la importancia de mantener hábitos saludables que beneficien tanto nuestro bienestar físico como emocional. Por ello, es vital que, no solo hoy sino todos los días, nos propongamos realizar pequeños cambios que puedan tener un gran impacto en nuestra vida diaria.
Como profesionales de la salud, incentivamos a todos a aprovechar el Día Mundial de la Nutrición como una oportunidad para reflexionar sobre nuestros hábitos alimentarios y comprometernos a mejorar nuestra dieta. Alimentarse bien no es solo una cuestión de salud física, sino también de bienestar emocional y mental. ¡Hagamos de la nutrición consciente una prioridad diaria para vivir una vida más saludable y feliz!.
NUT. CRISTINA YÉPEZ
LIDER SERVICIO NUTRICIÓN
NOVACLÍNICA SANTA CECILIA